Una cifra récord de personas necesitarán ayuda humanitaria durante el 2022
Adrian Ciancio
COLABORADOR
La ONU y sus socios estiman que 274 millones de personas en todo el mundo necesitarán ayuda humanitaria durante el próximo año, incluyendo a 43 millones que se encuentran en una situación desesperada al borde de la hambruna. Esto constituye una cifra sin precedentes y un desafío para la comunidad humanitaria a la hora de recaudar fondos para poder llevar a cabo los programas de ayuda.
El Panorama Humanitario Global (GHO por sus siglas en inglés) publicado por la ONU y sus socios esta semana, incluye la evaluación de necesidades humanitarias globales. También, presenta los planes y requerimientos para asistir a las 183 millones de personas más necesitadas en 63 países. Se calcula que se necesitarán 41.000 millones de dólares para implementar esos planes, superando en 17% al GHO del 2021.
Las necesidades humanitarias vienen aumentando a un ritmo acelerado en los últimos años exacerbadas por los conflictos armados, el aumento de la pobreza, la pandemia y el cambio climático. De hecho, las necesidades crecen a un ritmo mucho más veloz que el financiamiento disponible para hacerles frente. En el año 2021, solo se ha conseguido el 46% de lo necesario, y en gran medida, ese financiamiento fue desembolsado en el último trimestre del año dificultando la implementación de programas durante los primeros meses. En mayo del 2021, el financiamiento aún no alcanzaba el 20% de lo requerido.
A pesar de eso, según la ONU, se consiguió asistir a 107 millones de personas durante el 2021 – un 70 por ciento del objetivo original. Pero el financiamiento no se distribuye proporcionalmente entre las crisis. Muchas contribuciones se realizan pre asignadas a un país, lo que genera que algunos países obtienen un financiamiento aún menor de la media, como vemos en el cuadro a continuación.
Para el GHO 2022, áfrica central y oriente medio son las regiones más afectadas por las crisis. Los países que más recursos necesitan en este plan son Afganistán, seguidos por Siria y Yemen. Pero las crisis afectan a todo el mundo. El 1% de la población mundial está desplazada, y si todas las personas que necesitan ayuda humanitaria constituyen un país, este sería el cuarto más poblado del mundo.
El nuevo jefe de asuntos humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, señaló que: «La crisis climática está golpeando primero y peor a las personas más vulnerables del mundo. Los conflictos prolongados persisten y la inestabilidad se ha agravado en varias partes del mundo, especialmente en Etiopía, Myanmar y Afganistán. La pandemia no ha terminado, y los países pobres se ven privados de vacunas”.
Unas 120 ONG publicaron una carta en la que instan a los líderes mundiales a financiar las crisis humanitarias, y sobre todo, las actividades para prevenir la urgente hambruna en todo el mundo. Algunas agencias también han apelado a los multimillonarios del mundo a hacer sus contribuciones a tales efectos.
Necesitamos un gran esfuerzo para que los donantes realicen las contribuciones para que la ayuda alcance a los más necesitados. También los actores humanitarios deben buscar otros modos de financiamiento y de comunicar las crisis para que la toma de conciencia sobre los riesgos que enfrentamos sea cada vez más extendida.
Los desalentadores resultados de la cumbre climática COP26, el resurgimiento de mutaciones del Covid-19, la hambruna mundial a punto de estallar y el recrudecimiento de varios conflictos, auguran un 2022 preocupante y sombrío. En especial, si la pandemia continúa con sus efectos devastadores sobre los países más pobres, afectando no solo la salud, sino también la economía y aumentando la desigualdad.
Más información sobre el GHO 2020, puede encontrarse aquí.
