Netanyahu nunca defrauda
Para elPeriódico.com
En mitad de una abominable masacre que no cesa y una corriente de críticas generalizadas sobre una campaña de castigo indiscriminado contra civiles indefensos, se podría pensar que Benjamin Netanyahu estaría dispuesto a aprovechar cualquier resquicio para poner fin a la barbarie y lograr cuanto antes la liberación de los prisioneros que Hamás aún tiene en sus manos. Sin embargo, Bibi nunca defrauda. Prefiere ver a su país señalado como potencial genocida por la Corte Internacional de Justicia, con tal de mantener el rumbo supremacista que -junto a Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich, con la complicidad adicional de Benny Gantz- se ha trazado para lograr lo que sigue planteando como una victoria absoluta, que dice tener al alcance de la mano.