La paz sigue hoy tan lejos de Ucrania como antes de la cumbre de Suiza
Para elDiario.es
No ha sido la primera –antes fueron Dinamarca, Arabia Saudí, Malta y Suiza– y tampoco será la última, aunque no se ha dado a conocer quién será el anfitrión ni la fecha de la próxima. En todo caso, si se va un poco más allá de los rimbombantes titulares que la han definido como la Cumbre de la Paz, la reunión que se ha celebrado este pasado fin de semana en Suiza ofrece inevitablemente un balance agridulce para sus promotores.
Ha sido, sin duda, el mayor esfuerzo diplomático realizado por Kiev, con el respaldo de sus aliados occidentales, para visibilizar el generalizado apoyo a la fórmula de paz presentada por Volodímir Zelenski en 2022. Pero, aunque sea cierto que han logrado la presencia de representantes de un centenar de países (se habían enviado 160 invitaciones), también lo es que la otra mitad de los que constituyen la comunidad internacional no ha estado presente, con el añadido de que solo unos 60 de ellos han estado representados por sus jefes de Estado o de Gobierno, y que incluso una docena de los asistentes ha declinado firmar el comunicado final. Con todo, la lectura inmediata, ya conocida de antemano, es que el conjunto de los gobiernos occidentales está con Zelenski y los suyos –sin que eso signifique que todos ellos están decididos a apostar por Ucrania hasta el final– y que Rusia no está sola.