Europeos consideran que la crisis no debiera interferir con la cooperación para el desarrollo

Por Valentina González

Un rotundo respaldo por parte de la población europea a la cooperación al desarrollo reflejó el último Eurobarómetro, que indagó en los efectos que la crisis económica pudo haber tenido en la percepción y expectativas de los europeos respecto de la cooperación internacional. El 90% de los encuestados consideró que es importante ayudar a los países en desarrollo y un 30% opinó que la ayuda era escasa.

Además, en línea con el objetivo central de la Unión Europea para la cooperación al desarrollo, uno de cada dos entrevistados consideró la pobreza estructural como el mayor problema que enfrentan los países en desarrollo, por encima de la crisis económica y alimentaria.

Una revelación interesante de esta encuesta es la demanda por parte de la población europea de una mejor información respecto de los temas de desarrollo, puesto que el nivel de interés que suscita el tema no se condice con el nivel de conocimiento que los encuestados demostraron tener. Un ejemplo es que el conocimiento sobre los objetivos de desarrollo del milenio sigue siendo bajo, pues casi tres cuartas partes de los entrevistados nunca han oído hablar de ellos y, pese a que un cuarto de los encuestados declararon tener cierta familiaridad con ellos, sólo 1 de cada 20 realmente entiende su contenido. En relación con esto, un 42% de los entrevistados dijo que se necesitaba una mayor y mejor cobertura de los medios de comunicación a los temas de desarrollo.

En cuanto a lo que los europeos creen que es la motivación tras la cooperación que desarrollan los países ricos, las respuestas mayoritarias fueron: contribuir a la estabilidad mundial, intereses propios (como mejorar el comercio o las relaciones políticas con terceros países) y evitar la migración. Desde 2007 se redujo el número de personas que pensaba que una de las principales motivaciones era desalentar las causas del terrorismo mundial y se incrementó el número de personas que sugiere motivos altruistas para ayudar a otras naciones. Las mujeres fueron más propensas a esta última opción.

En general fueron los jóvenes y las personas de mayor educación los más favorables a la cooperación internacional. Los mayores, por su parte, se mostraron más escépticos, aunque de todas maneras opinan que es relevante mantener los compromisos. Las tendencias políticas y el nivel educacional también influyeron en el grado de adhesión a la ayuda al desarrollo. En general la gente de tendencia de izquierda y de mayor educación es un levemente más proclive a valorar la ayuda al desarrollo.

Pese a que el tema de este Eurobarómetro es bastante coyuntural, forma parte de una serie de estudios que, desde 2004, ha buscado explorar la consciencia europea en los temas de desarrollo.

Informe completo en: http://ec.europa.eu/public_opinion/archives/eb_special_en.htm