Relatoría de los foros “Reducción del Riesgo de Desastres” y “Calidad y evaluación en la acción humanitaria”
Con el objetivo de posibilitar el intercambio, debate y generación de conocimiento entre actores especializados, el IECAH, con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), ha desarrollado dos foros de interés durante 3 meses (del 1 de febrero al 30 de abril de 2012) que forman parte de un proyecto más global de mejora de AH con la CAP de la AECID (1).
Dichos foros han estado dedicados a la Reducción del Riesgo de Desastres (RRD) y a la calidad y la evaluación en la acción humanitaria (AH).
Para ello hemos contado con dos expertos en dichas materias: Jacobo Ocharan, responsable de reducción de riesgos en OXFAM América y Judith Herrera, consultora independiente y con un amplio recorrido en la cooperación y en la acción humanitaria, tanto en la ejecución directa de proyectos como en su evaluación.
En lo que respecta al foro de RRD, se plantean varias cuestiones de especial relevancia durante el encuentro. Entre ellas, si la RRD salva vidas y cómo demostrarlo. Asimismo, los asistentes se preguntan el grado de eficiencia de la Gestión del Riesgo de Desastres (GRD). En este sentido, los expertos coinciden en que el objetivo de la GRD es salvaguardar la vida e integridad de las personas, así como minimizar las víctimas potenciales en caso de desastre. Además, se proponen ideas para que se reconozca el valor de la GRD. Entre ellas, cabe destacar la formación, es decir, la incorporación de la GRD en el ámbito educativo; la inclusión de los Sistemas de Alerta Temprana (SAT) de manera adecuada para desarrollar un proceso con éxito, así como programas de GRD en las políticas de los gobiernos en las que se abarquen todos los sectores posibles. Finalmente, se propone elevar la GRD a categoría de Derechos Humanos y se comenta el hecho de que la GRD supone una inversión que protege de pérdidas humanas y económicas.
A continuación, cabe destacar el papel de las ONG y, para ello, se plantea la cuestión de si tienen que sustituir al Estado en la GRD, dado el incremento de trabajo de las mismas en la actualidad. La respuesta es rotunda y unánime: las ONG nunca deben suplir el papel de los Estados, sino apoyarlos o incluso presionarlos para que estos asuman su responsabilidad en este ámbito. En cuanto al papel de la ONU y otros actores internacionales, se califica como positiva su labor de concienciar e intentar implicar a los estados.
Por otro lado, surgen dudas acerca de la tendencia futura de los financiadores dados los recortes que se están produciendo y las dificultades para obtener financiación.
En cuanto al foro de calidad y evaluación de la acción humanitaria, se plantea, en primer lugar, la cuestión de si se piensa en la evaluación desde la identificación y planificación del proceso. La opinión resulta unánime: la evaluación no se contempla desde la identificación de los procesos, sino al iniciar los términos de referencia para contratar la evaluación. Se apuntan diversas razones, a saber: la falta de tiempo, de capital, de recursos humanos y expertos en evaluación; la falta de mejoras en proyectos futuros, la falta de creatividad, así como de voluntad política por parte de los donantes y las organizaciones.
Asimismo, otro de los problemas de la evaluación es la escasa importancia que se le presta la mayoría de las veces, por lo que no se consigue extraer de ella todo el potencial que puede llegar a tener. Tal y como indican los participantes, se requiere fortalecimiento institucional, esto es, que las autoridades se encarguen de la gestión, identificación y evaluación de proyectos.
A modo de conclusión, cabe subrayar la idea de que las evaluaciones se realizan, por norma general, por exigencia de los financiadores una vez se elaboran los términos de referencia. Del mismo modo, la planificación se lleva a cabo sin considerar la evaluación como parte integral del proceso, por lo que no se vincula la definición de indicadores con el monitoreo y la evaluación. En este sentido, se señala que la participación tiene que ser el alma del proyecto humanitario y estar presente en todas las fases con el fin de obtener buenos resultados. La calidad de las evaluaciones depende en muchos casos de la filosofía de la organización y del personal del proyecto.
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Notas:
1. Esta publicación ha sido realizada con el apoyo financiero de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), con cargo al Proyecto «Profundización y especialización en aspectos sectoriales de la acción humanitaria para la comunidad española e hispanohablante». El contenido de dicha publicación es responsabilidad exclusiva del IECAH y no refleja necesariamente la opinión de la AECID.