Putin bordea el abismo
Para elPeriódico.com
Rusia no tiene ahora ninguna posibilidad de volver a recuperar la iniciativa en el campo de batalla, y ya es imposible descartar la opción nuclear.
Hace apenas unos meses, cualquier amenaza procedente de Moscú era tomada muy en serio, considerando que procedía de la mayor potencia nuclear del planeta y de las segundas fuerzas armadas, solo por detrás de las estadounidenses. Hoy, siete meses después de ir dejando al descubierto la desnudez de esa maquinaria militar en territorio ucraniano, la credibilidad de Putin cuando pretende imponer su dictado por la fuerza está por los suelos. Los reveses que están sufriendo sus tropas son de tal magnitud, tanto en Jersón como en el frente oriental, que permiten concluir que Rusia no tiene ahora ninguna posibilidad de volver a recuperar la iniciativa en el campo de batalla. De ahí se derivan dos posibles vías de actuación: resistir la embestida a toda costa, con la esperanza de que el mal tiempo juegue a su favor ralentizando los ataques ucranianos hasta la próxima primavera, y/o traspasar el umbral nuclear.