Israel y Líbano firman un alto el fuego que no resuelve (casi) nada
Para elDiario.es
Si se parte de la idea de que siempre es preferible que las armas callen para dejar opción a que se pueda resolver un conflicto a través del diálogo, habría que dar la bienvenida al acuerdo entre Israel y Líbano para establecer el cese de hostilidades.
En 13 meses de violencia creciente, especialmente grave a partir del inicio de la invasión israelí el pasado 1 de octubre, más de 3.800 personas han muerto y un millón se han visto desplazadas en la parte libanesa —añadidos a la gravísima crisis estructural que atraviesa el país al menos desde hace cinco años—. Mientras, Israel contabiliza unos 140 muertos entre civiles y militares y unos 80.000 evacuados de las zonas próximas a la frontera común.