Inundaciones en Valencia: recomendaciones para la ayuda ciudadana
En momentos de crisis, la colaboración ciudadana juega un papel crucial, tanto a nivel local como en la movilización internacional. Sin embargo, las buenas intenciones no son suficientes y pueden, en algunos casos, tener efectos perjudiciales sobre aquellas personas a las que se intenta ayudar. A lo largo de las últimas décadas, el sector de la ayuda ha ido integrando cada vez más iniciativas, herramientas y enfoques para abordar la gran complejidad de asegurar la calidad de la ayuda en situaciones de crisis, ofreciendo pautas para garantizar que la ayuda se ajuste a las necesidades de las personas afectadas por una emergencia.
Desde su creación, el IECAH ha dado seguimiento a estos esfuerzos y participado en colaboración con ONG, organismos de Naciones Unidas y de la Cooperación española en numerosas situaciones de emergencia. Basándose en estudios recientes que abordan cuáles son las mejores formas de canalizar la solidaridad ciudadana en una emergencia, es relevante tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Las necesidades de las personas afectadas por una emergencia deben estar en el centro y guiar la respuesta, para que la ayuda proporcionada sea respetuosa y verdaderamente beneficiosa. Es fundamental escuchar a los vecinos y las vecinas de las localidades afectadas y a las autoridades para conocer qué necesidades tienen y qué ayuda es la que realmente necesitan.
- Hay que pensar más allá de la urgencia, pues los efectos de una emergencia duran más allá de los momentos iniciales y es necesario que la ayuda siga llegando posteriormente. Los vecinos y las vecinas de Valencia afectadas por la emergencia van a necesitar ayuda durante los próximos meses para poder reconstruir sus casas y negocios. Por ello es importante no precipitarse en hacer una donación rápidamente pues la ayuda será también necesaria más adelante.
- Es importante priorizar las donaciones en efectivo a las donaciones en especie. En muchas ocasiones, los bienes donados pueden no ser adecuados a las necesidades de las personas afectadas, suponer costes logísticos y administrativos adicionales, o no ser necesarios cuando llegan a destino. Además, en productos como medicamentos no se puede garantizar su seguridad. Muchas instituciones, asociaciones ciudadanas y ciudadanos particulares han creado iniciativas para recaudar bienes de primera necesidad y transportarlos directamente a las zonas afectadas por la emergencia. Sin desmerecer estas aportaciones, en ocasiones puede producirse una sobresaturación de algunos bienes mientras que se dan carencias de otros. Por ello, hacer una donación económica permite una mayor flexibilidad y eficacia a las organizaciones de ayuda para paliar las necesidades de las personas afectadas.
- Es importante tener en cuenta las organizaciones con las que se colabora, que tengan una reputación sólida y que cuenten con canales oficiales para realizar las donaciones. Por ello, lo mejor es acudir a la página web de la Coordinadora Valenciana de ONGD para comprobar qué organizaciones están recaudando donaciones y qué trabajo está haciendo cada una de ellas.
- Es necesario ser conscientes de los impactos negativos que nuestras acciones pueden tener. En ocasiones las buenas intenciones pueden no ser suficientes si la ayuda no está coordinada ni canalizada para atender las necesidades de las personas afectadas. El voluntariado es un aporte encomiable siempre que responda a las necesidades del momento y no entorpezca el trabajo de otros actores. Si se quiere participar como voluntario/a en las tareas de limpieza, es importante que se recurra a los canales establecidos para que el trabajo desinteresado sea beneficioso para las comunidades que más lo necesitan. Además, es muy importante ser prudente y protegerse durante estas labores de limpieza para evitar peligros para la salud.
- Es fundamental que la ciudadanía se informe de forma amplia sobre el contexto de una crisis, entendiendo cuáles son las verdaderas necesidades de las personas afectadas y pudiendo así tomar mejores decisiones sobre cómo ayudar. En este sentido, es necesario no dejarse llevar por el alarmismo que puedan mostrar los medios de comunicación y tener mucho cuidado con los mensajes que se reciben a través de redes sociales, pues no todo el mundo es bienintencionado. Es recomendable acudir a fuentes de información oficiales y no compartir los bulos que proliferan durante los últimos días.
- Es importante pedir transparencia y rendición de cuentas a las organizaciones con las que se colabora, generando así un entorno de confianza en el que se garantice el uso correcto de la ayuda.
- Es vital entender que nadie tiene por sí solo la solución a una crisis, que el trabajo conjunto de las organizaciones de ayuda, las administraciones y la ciudadanía es fundamental para maximizar el impacto de la ayuda y contribuir a una más rápida recuperación de las comunidades afectadas. La ayuda ciudadana es muy importante para los vecinos y las vecinas de Valencia, pero también es necesaria la colaboración con las organizaciones de ayuda y autoridades competentes.
Estas recomendaciones pretenden ayudar a canalizar mejor la solidaridad ciudadana, tan relevante e importante para las comunidades afectadas, de forma que se maximice la ayuda a las personas afectadas para que puedan reconstruir sus vidas de forma digna.