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Actividades | Ciclos, jornadas y seminarios

El IECAH participó en el seminario “Colaboración y puntos de encuentro entre las Fuerzas Armadas y las ONG en operaciones internacionales y/o humanitarias”.

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El día 28 de noviembre de 2013 tuvo lugar en el CESEDEN, Centro Superior de Estudios de Defensa Nacional, una jornada de trabajo con el lema «Colaboración y puntos de encuentro entre las Fuerzas Armadas y las ONG en operaciones internacionales y/o humanitarias» con el propósito de iniciar un debate en el que representantes de las Fuerzas Armadas, la AECID y ONG como IECAH, Médicos sin Fronteras, Intermón Oxfam y Cruz Roja pudieran reunir experiencias y estudiar los puntos de acercamiento así como tratar de limar los puntos de desencuentro.

Se parte pues de la idea de establecer una colaboración conjunta entre los distintos actores que tienen presencia en contextos de crisis, para tratar de coordinar los esfuerzos sabiendo que no es posible establecer reglas magistrales, ya que cada contexto es único y la respuesta será diferente en cada caso.

En este sentido, es importante comenzar con un problema conceptual, el de la definición de estos intentos de colaboración como cooperación cívico-militar (CIMIC). Todas las partes están de acuerdo en que este concepto, que nace en el ámbito militar y hace referencia al estricto cumplimiento del objetivo de la misión, no contempla los principios humanitarios y, por tanto, no puede dar cabida a un intento de colaboración con los demás actores. Surge así a lo largo de las jornadas la necesidad de superarlo.

Por otra parte, también hay acuerdo en la necesidad de delimitar las funciones de cada actor, y en concreto, establecer con claridad que la acción humanitaria no es competencia de las Fuerzas Armadas, ya que ni es su misión ni están capacitadas para prestarla.

Con esta delimitación clara, cualquier tipo de colaboración debe estructurarse en torno a la necesidad de contribuir a la acción humanitaria. La coordinación no es el objetivo último sino que es el medio para lograr la paz y la estabilidad y el desarrollo de la acción humanitaria.

Dicho esto, se parte de concepciones diferentes pues las Fuerzas Armadas responden a criterios establecidos por la política exterior de un Estado y las ONG tienen un mandato y unos principios, de neutralidad, imparcialidad e independencia, que en todo caso van a marcar los límites de esta colaboración. También hay reticencias respecto a la percepción de esta colaboración en los contextos donde se va a prestar la ayuda humanitaria: la mejor seguridad para las ONG es la adherencia a estos principios y, por tanto, es necesario saber cómo va a ser percibida esta colaboración, ya que podría poner en peligro a los cooperantes y a las comunidades destinatarias de la ayuda.

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