investigar. formar. incidir.

Menú
Actualidad | Artículos propios

La creación del Estado palestino en el 2011

imgboletin_Palestina
El primer ministro de la Autoridad Palestina, Salam Fayyad

Frente al enquistamiento de la situación del Territorio Palestino Ocupado, la ausencia de perspectivas respecto a la reanudación de las negociaciones de paz, Salam Fayyad  ha anunciado recientemente que si no hay avances en el proceso de paz se declararía de forma unilateral la creación del Estado palestino . El plan de gobierno que Salam fayyad ya presentó en agosto de 2009 para los próximos dos años: «Acabando la ocupación y estableciendo el Estado palestino» tiene como objetivo final declarar de forma unilateral el estado palestino en el 2011. Después del fracaso de EEUU en sus intentos de reactivar el proceso de paz y los desplantes del gobierno de Netanyahu, las perspectivas de reanudación de las negociaciones de paz son cada vez más lejanas y con ella la solución de los dos Estados parece cada vez más frágil. Se trata de un momento crítico frente al cual la Autoridad Palestino (AP) no ha querido mantenerse con los brazos cruzados.

La iniciativa de Fayyad tiene varios objetivos. Por un lado se trata de afianzar la propia credibilidad de la AP, cuya imagen se ha ido deteriorando a medidas que se ha radicalizado el enfrentamiento con Israel. La ambigüedad de su posición frente a la ofensiva plomo endurecido, su falta de apoyo al Informe Goldstone al principio, así como su disposición a sentarse en la mesa de negociación al tiempo que Israel sigue adelante con su política de hechos consumidos han supuesto un fuerte desgaste para la AP que será difícilmente reversible mientras no haya cambios sustanciales en la actitud y estrategia seguida por Israel.  En este sentido la idea de actuar de forma unilateral pretende mostrar que la AP tiene recursos aunque estos últimos sean muy limitados para ir diseñando una estrategia independiente de la política seguida por Israel. Se trata de mostrar también que la AP es capaz de ser algo más que el esbirro de Israel para garantizar la seguridad de Cisjordania e ir recobrando  la confianza de los palestinos.
No será una meta fácil: los estudios de opinión realizados por el Palestinian Center for Policy and Survey Research apuntan un gran escepticismo por parte de la población respecto a las perspectivas futuras de Palestina y el nacimiento del Estado palestino . A nivel interno Fayyad cuenta además con una base política frágil y muchos enemigos en su propio campo.

El plan de Fayyad trata al mismo tiempo de mantener a flote la solución de dos estados que está cada vez más comprometida por la política de hecho practicada por Israel y que avanza sin treguas sobre todo en Jerusalén.

Así mismo se trata de desarticular el argumento que los sucesivos gobiernos israelíes han esgrimido a la saciedad: la falta de interlocutores y las carencias de la AP en materia de gobernanza y seguridad para justificar la demora sin fin de las negociaciones sobre el estatuto final. Se trata de un elemento clave de la estrategia de Israel, aplazar el proceso y quedar a la espera de que el statu quo genere una vez más una ola de radicalización y violencia en el bando palestino que una vez más refuerce su argumentación respecto a la ausencia de interlocutor válido para la paz.

El plan de Fayyad es también un instrumento clave para seguir implicando a la comunidad internacional. Permitirá volver a renovar el voto de confianza que el Dr Fayyad tiene sin duda en su bolsillo por su paso por instituciones internacionales como el FMI y su fama de gestor eficaz y transparente. Hasta la fecha la construcción del Estado palestino ha sido la piedra angular de las estrategias de cooperación de los principales donantes del TPO y ha canalizado ingentes cantidades de ayuda.

Para el 2010 el gobierno español anunció la entrega de 30 millones de € en el marco de la reunión en Madrid del Comité de Enlace Ad Hoc (AHLC, por sus siglas en inglés), que coordina la ayuda internacional al Territorio Palestino Ocupado. En el curso de esta reunión los principales donantes manifestaron su apoyo al plan del primer ministro palestino, Salam Fayyad, para crear las instituciones del futuro Estado palestino antes de finales de 2011.

La Autoridad Palestina ha solicitado 1.200 millones  a la comunidad internacional en el 2009y  la ayuda internacional representa el 22% de su PNB.

Es a la luz de esta dependencia de la economía palestina de la comunidad internacional como de Israel que hay que interpretar y matizar los buenos resultados económicos de Cisjordania resaltados por el reciente informe del Banco Mundial. El informe explica el logro de un crecimiento económico del 8% por tres factores principales: por un lado destaca las mejoras que la AP realizó en el ámbito de la seguridad, finanzas públicas y lucha contra la corrupción que ha permitido también reforzar la confianza del sector privado, el mantenimiento del apoyo de la comunidad internacional y el levantamiento por parte de Israel de unos 80 checkpoint, una medida de relativa importancia sabiendo que todavía quedan más de 500.

El crecimiento económico de Cisjordania es algo artificial ya que no se basa en el desarrollo de actividades productivas, sino que es debido en gran parte al crecimiento de los servicios proporcionados por la AP, pagados por la ayuda internacional y las remesas de la diáspora. Se trata además de una economía con varias velocidades y con una clara dependencia estructural de la economía israelí. Las tres cuarta partes de los productos de Cisjordania transitan por Israel o son vendidos en el mercado israelí.

El plan de Fayyad no deja de ser un proyecto ficticio ya que todos los factores que condicionan la emergencia de un estado palestino viable y sostenible dependen de Israel y de su voluntad política de llegar a una solución justa al conflicto.

Notas:
1.- Ver Haaretz, 14/4/2010 en http://www.haaretz.com/hasen/spages/1160513.html
2.- Ver http://www.pcpsr.org/

Publicaciones relacionadas